Y sí, la literatura de Literaria Kalean es un no parar y la semana anterior fue un buen ejemplo de ello: Logroño, club de lectura de Treviana y Nájera.
El domingo 22 de octubre aterrizamos en la Plaza del Mercado de Logroño para inmiscuirnos en el XI aniversario de economía y mercado social de Reas Rioja, al cual acudió una buena cantidad de puestos de gastronomía y artesanos venidos de muy dispares lugares de La Rioja. Allí celebramos un año más que un mundo más justo es posible a través del consumo responsable. Algo que resulta tan importante en nuestras sociedades, las cuales están saturadas de un consumismo desmedido.
Y así las cosas, el fin de semana siguiente cambiamos las tornas para acudir a la esperada cita con el club de lectura de Treviana. Esta vez tomó una nueva vertiente en su narrativa, pues, tal y como adelantamos en una entrada anterior, tocó poesía. De la mano de Vicente Robredo, que recitó de una magistral manera sus versos elegidos y un dispar de anécdotas de cuando residió en Treviana, el evento se alargó durante dos horas y media en la cual hubo inclusive un pingüe picoteo. Está claro que estas cosas maridan a la perfección con la literatura.
Y al día siguiente, Literaria Kalean voló hasta la catedral de Santa María La Real, en Nájera donde una buena confluencia de caminantes hacían meta en el Camino Real. Se desplazaron caminando desde San Millán de La Cogolla hasta esta conocida ciudad de Rioja Alta. Recordad que Nájera es una parada del camino de Santiago y está en pleno Valle de la Lengua. Todos salimos satisfechos por el buen discurrir de las jornadas.
Pues bien, como se ve, estos últimos días han estado cargados de literatura. Tanto en ciudades como en pueblos con menos población y esto evidencia que allá donde haya voluntad lectora, Literaria Kalean siempre andará rondando por las inmediaciones. Porque a fin de cuentas en esto consiste esta literatura errante; en recorrer municipios, exponer a los posibles lectores nuestras tres líneas narrativas y entablar, esto ocurre con mucha frecuencia, grandes conversaciones con futuros lectores o conocidos. Tal es el caso de Javier que, el domingo 28 se aproximó a nuestro puesto y no dudó en saludarnos para contarnos que un buen día de hace ya algún tiempo un escritor llamó a la puerta de su casa en Nájera y, tras entender su proceder, se llevó un ejemplar de «¿Y por qué no?» dedicado. Entonces, intrigado por nuestras obras, se decantó por «La Rioja y sus pueblos entre cuentos. Volumen 2» para su pequeña lectora.
Son experiencias como estas las que nos animan a continuar. Experiencias repletas de grandes conversaciones en torno a la literatura y las que se prevén porque hay que estar atentos debido a que antes de que concluya el año, tendremos nueva publicación.
¡Nos leemos?